Un día como hoy pero de 1960, el Real Madrid de España se consagraba campeón de la primera edición de la Copa Europeo- Sudamericana, tras derrotar a Peñarol de Uruguay por 5 a 1 en la partido de vuelta (la ida en Montevideo había terminado 0 a 0) jugado en el Estadio Santiago Bernabéu.
La “Copa Intercontinental” enfrentaba en dos partidos (una localía cada equipo, hasta la edición de 1980 que se dispuso jugar un solo partido neutral en Tokio, Japón) al ganador de la Champions League de Europa y a su semejante de la Copa Libertadores de América pero ya no existe, puesto que desde 2005 se lleva a cabo en dicha ciudad el Mundial de Clubes. Su ultima edición (2004) había enfrentado al Once Caldas de Colombia con el Porto de Portugal, partido que los europeos ganaron por penales.
El conjunto español accedió a la primera final luego de superar ampliamente al Eintracht de Frankfurt (Alemania) en la UEFA, en tanto que el compilado “Charrúa” lo hizo por haberse impuesto ante Olimpia de Paraguay en el ámbito sudamericano.
El encuentro de ida tuvo lugar ese mismo año en el Estadio Centenario de la capital uruguaya y pese a contar con la presencia de Alfredo Di Stéfano y Ferenc Puskas en el plantel, “Los Merengues” no pudieron sacarse diferencia alguna con los locales y el 0 a 0 final dejó el resultado abierto de cara a la revancha. Con muy pocos cambios respecto a las formaciones del partido que se había jugado dos meses atrás, españoles y uruguayos se enfrentaban para dirimir en el campo de juego cual de los dos se transformaría en el primer campeón del Mundo de la historia. A diferencia de Peñarol, Real Madrid aprovechó mejor su condición de local y fueron justamente sus figuras las encargadas de marcar la diferencia en el marcador. Con dos goles de Puskas, uno de la “Saeta Rubia” y mismo aporte de Herrera y Gento (Spencer descontó para Peñarol), Real Madrid cerraba la serie con una goleada y entraba definitivamente en la historia del fútbol Mundial de la mejor manera, por la puerta grande.
Sergio López
